Hola a todos, me llamo Daniel y soy uno de los 75 becados por las fundaciones Barrié y Amancio Ortega para cursar un año académico en los Estados Unidos.
Este blog está destinado a compartir todas mis experiencias vividas día a día al otro lado del charco.

"Espero que os guste y que disfrutéis como si lo vivierais vosotros mismos "

domingo, 29 de noviembre de 2015

Thanksgiving


El pasado 26 de Noviembre fue el día de Acción de Gracias, o thanksgiving como lo llaman ellos. Cómo no, era una de las fiestas más importantes y había que celebrarla con la familia de Matt.
La familia de Matt vivía en Mosinee, otro "pueblo" o "villa" a una hora y media de Medford, por eso nos levantamos a las 7 de la mañana, una ducha rápida y al coche. Matt y algunos de la familia tenían algo de miedo a ir porque aquel día teníamos tormenta de nieve y no nos queríamos quedar atascados allí con el coche toda la noche.

Llegamos los primeros y el padre nos estaba esperando. Después de un breve tour por la casa, y enseñarnos cómo se estaba cocinando el pavo, fuimos directamente al sótano, dónde estaba todo preparado: la mesa, los sofás y sillones y que no falte, una televisión enorme con el canal FOX SPORTS. Al parecer, la tradición era que mientras todos estábamos comiendo y hablando, había que ver los partidos de futbol americano del día de acción de gracias. Y con más razón, los Green Bay Packers jugaban así que no había discusión sobre qué canal poner.


A eso de las 9 y media, empezó a llegar toda la familia, y tocaban las presentaciones, las preguntas y demás (menos mal que son gente encantadora). Una vez conocí a todos comenzamos a conversar (sobre todo de dónde era yo y si me gustaba el futbol americano) y el tiempo pasó bastante rápido.
Una hora antes de que el pavo estuviera preparado, empezaron a servir bandejas con aperivos: nachos con salsa de queso, melón y melocotón, snacks con mantequilla de cacahuete, surtido de quesos... y he aquí la mejor parte, yo cuando lo ví al principio no lo reconocí porque estaba todo enrollado, pero luego al probarlo se me debió de quedar la cara como de tonto. Resulta que a modo de pincho moruno, nos pusieron un surtido de jamón serrano.
Obviamente le pregunté a la madre dónde lo había comprado, y me dijo que en el mercado del condado, que era una delicatessen y que costaba un riñón. Luego se quedó pensativa por qué le había preguntado eso, y en ese momento se dió cuenta de que yo era español. Bueno, me empezó con que si "tipical spanish" y me acabó contando toda la historia del jamón serrano. La verdad es que es normal que estuviera tan entusiasmada porque para ellos es casi algo exótico, y no todo el mundo se lo puede permitir.



Esa fue la anécdota del momento, el jamón serrano tipical spanish!!
Intenté comer sólamente un par de lonchas... por que era algo que yo podía comer todos los días en España, y quería que todo el mundo lo probara. Eso sí, todas las lonchas que sobraron me las zampé yo, y me puse las botas.
Finalmente tocaba la hora de la verdad, la hora del pavo. Pusieron una tonelada de cosas sobre la mesa a modo de buffet, así ibas dando vueltas en circulos alrededor de la mesa y surtirte de todo lo que quisieras.
Antes de empezar, todos nos tuvimos que coger de la mano y bendecir la mesa. Después, cada uno tenía que hablar un poco y dar las gracias por lo que quisiera. Por supuesto a mí me tocó hablar delante de todos... y me pidieron que por favor lo hiciera es español. Fue algo raro, hablar español delante de americanos, es como si un chino o un sueco dan un discurso de Navidad en España. Claro, al final todos se quedaron como: oh! Interesante (no me acabo de neterar de nada) pero igualmente interesante! 

Ahora sí, era la hora de la verdad, y allá fueron seis personas, cada una con un cuchillo jamonero a cortar el bicho como se pudiera. Parecía que le estaban haciendo la autopsia al pavo relleno.
Una vez todo despiezado y listo, nos dieron unas bandejas muy chulas con motivos otoñales a cada uno y ya era la hora de servirse (cuanto más mejor). Yo por supuesto me serví de todo!


En el menú teníamos: pavo relleno, roast beef, carne asada con algo verde de aspecto vomitivo en el interior (pero que estaba buenísimo), puré de pata (con salsa de carne o sirope de arce opcional), más tipos de carne (sería de bisonte o de mamut o algo así), crema frambuesa y marshmallow, crema de calabaza con marshmallow también, puré de cranberry (que no tengo ni idea de lo que es en español, me parece que es algo como arándano o grosella), pan tostado con mantequilla de hierbas, pancakes y finalmente un bollo de pan. 
Bueno pues esto era la ronda uno, yo debí de comerme como cuatro bandejas como esta, pero es que estaba todo tan bueno...
Cuando acabé me sentía hinchado, y resoplaba, era la personificación del muñeco de Michelín.
Creo que en ese momento mi cuerpo tenía más forma esférica que forma de cuerpo. Era la pelota humana.
Lo peor no fue ahí, si no que cuando todo el mundo estaba resoplando de lo llenos que estaban, empezador a sacar todas las tartas de acción de gracias: las de calabaza y las de nueces y sirope de arce.
Lo peor de todo es que quería probarlas sin tener un colapso estomacal!
Al final tuvimos una idea infalible, cogimos los trozos más minúsculos de ambas y las probamos, y el resto nos lo llevabamos a casa en bolsas.
Afortunadamente mi estómago aguantó el tirón.
Una vez reposamos en los sofás, hablamos y demás, tocaron las despedidas y acto seguido, vuelta a Medford.

En resumidas cuentas, un día que me lo pasé increiblemente bien y que me encantaría repetir... desafortunadamente, Acción de Gracias sólo se celebra una vez al año.
El caso es que ahora todo Medford está decorado con luces de Navidad: las casas, las calles y todos los estableciemntos. La verdad es que parece de película.
Así que ahora toca cambiar el chip, de Thanlsgiving a Christmas. Estoy seguro de que va a ser genial también.


Y eso es todo por ahora, espero que os haya gustado esta nueva experiencia americana. Seguiré escribiendo por supuesto! Un saludo a todos.

domingo, 22 de noviembre de 2015

It's Packer Time!!

Hace un par de semanas, tres amigos de Medford me invitaron a ver mi primer partido de la NFL, la liga profesional de futbol americano, y por supuesto, les dije que sí, sin dudarlo ni un minuto. Luego me comentaron que las entradas saldrían en 80$ en vez de los 300$ originales porque el padre de uno tenía tickets de temporada.
 ¡Un chollo!

El pasado Domingo llegó el día, y nos tuvimos que levantar a las 7 de la mañana porque el partido empezaba al mediodía, en Green Bay.
Quedamos todos en la casa de Jake que iba a hacer de conductor ese día y allá nos fuimos, a la aventura, cuatro chavales de 16 años en un coche conduciendo durante 3 horas y con un maletero lleno de brownies, patatas fritas, cookies, y una nevera portátil con hielo y una tonelada de bebidas energéticas.
La táctica era que mientras Jake conducía, Garret (el copiloto) hacía a las veces de Dj, y retumbaba el coche...y Osy y yo que íbamos en la parte trasera, teníamos acceso al maletero e íbamos suministrando la comida.
Se podría decir que formábamos un buen equipo.
3 horas más tarde llegamos a Green Bay, un ciudad más pequeña incluso que Ourense. 
En Green Bay juegan los Packers, uno de los equipos más antiguos de futbol americano.
Normalmente suele haber equipos en las grandes ciudades: New York, Chicago, Minneapolis, Dallas... lo cual es una pasada pensar que una ciudad más pequeña que Ourense tenga uno de los mejores equipos de la liga. Sería como si en Ourense jugara el Real Madrid.








Militares transportando la bandera antes del partido








Lambeau Field



Los alrededores del estadio estaban abarrotados y la gente ofrecía sus casas para que los coches pudieran aparcar, a cambio de 20$.
Tenían una fiesta montada antes del partido espectacular... gente haciendo barbacoas, bebiendo cerveza, jugando con pelotas de futbol americano, bailando y haciendo el ganso... aproximadamente debía de haber unas 100 mil personas ahí afuera, había algunas que no tenían ni entrada pero iban a la fiesta prepartido, hacían perritos calientes y conectaban la tele en la caravana, otros revendían entradas a precio de oro. Menos mal que entramos por una de las puertas que no tenía tanta gente, si no, no hubiéramos entrado en la vida.

 


 

Gente esperando para entrar en el estadio




Por fin dentro



   
Presentación de los jugadores


  
Squad



    
   
Momento del himno nacional





Estuvimos parte del partido bailando para ver si nos sacaban en las pantallas gigantes, pero no hubo suerte...


   









Aquel día, se batió el récord de asistencia en Lambeau Field, aproximádamente 85 mil personas llenaban el estadio, y teniendo en cuenta que la ciudad tiene escasos 100 mil habitantes, está bastante bien.


Fue un partido bastante igualado, en el que pudimos ganar pero nos falló la última jugada en el último segundo. Al final del partido la gente estaba algo mosqueada porque los Packers habían empezado la liga sin perder ningún partido (6-0), y ahora llevábamos 3 partidos seguidos perdidos.

Nosotros también estábamos algo decaídos porque los Packers tenían que ganar di querían mantenerse entre los tres mejores, y tener más posibilidades para jugar la "SuperBowl"

En cualquier caso, fue un privilegio poder ir a un evento como este y pasármelo tan bien, la verdad es que merece la pena.


Fin del partido


Una vez salimos del estadio, fuimos a un centro comercial a cenar, y me llevaron a A&W, un sitio de comída rápida típico americano. Y me hicieron probar una hamburguesa tamaño mi cabeza, y el batido de Oreo y menta (eso sí que es un pecado... que bueno estaba!!)
Al terminar, nos fuimos al coche y vuelta a Medford. Los tres que no conducíamos vinimos roncando y no nos enteramos de nada, menos mal que el piloto estaba atento. Llegamos aproximadamente a las 9 de la noche... un día agotador.

Espero que os haya gustado la entrada tanto como a mí de poder ver el partido en directo.
Eso es todo por ahora, en apenas una semana tenemos Thanksgiving y me muero de ganas por saber que haremos.
Otra de las novedades es que, después de una semana rarísima con temperaturas medias de unos 10-15 grados (primaverales), ya han bajado definitivamente las temperaturas. Ahora estamos a -11°C y nieva casi todos los días. No sé si es que tengo el termostato corporal tonto pero -11 grados tampoco me parece para tanto, como un invierno en Ourense. El caso es que se supone que baja hasta los -30° Fahrenheit en Diciembre y Enero, y aun no sé si estaré preparado.

Un saludo a todos y hasta la próxima entrada!